El pasado fin de semana, 18 y 19 de marzo entre las 15 y 20 de cada día, la ONG AnyBody Argentina, de la cual soy participe, fue invitada a participar del espacio Espíritu Verde en el festival de música Lollapalooza, realizado en el Hipódromo de San Isidro en Buenos Aires (Argentina) y junto con la campaña “el talle único no es el único talle” nos hicimos presentes con placer. La organización, surgida de AnyBody Inglaterra es parte de “Endangered Bodies” (cuerpos en riesgo de extinción), un movimiento que genera conciencia y lucha con la epidemia del odio corporal. En otras palabras nuestro objetivo es concientizar a la sociedad, en especial a los jóvenes que muchas veces son los más afectados por las presiones sociales, y que se genere conciencia sobre la percepción del ideal de belleza y la salud de las personas. Hay más sedes en el mundo Estados Unidos, Brasil, Irlanda, Australia, Alemania y México, promulgando el cambio en la cultura de la apariencia física, la relación con el cuerpo y la alimentación, así las próximas generaciones puedan cuidar y disfrutar de sus cuerpos. La sede en Argentina (Buenos Aires) tiene lugar desde marzo del 2011, apoyando programas de salud y educación para promover ese cambio, y desea que también políticos y profesionales de los medios de comunicación trabajen temas que influyan en la percepción de la gente.
El “talle único” trata de que las prendas comercializadas sólo vienen en UNA talla, lo que quiere decir que para usar esa prenda si o si hay que tener determinado cuerpo o medidas, y sabemos por experiencia o simple observación que hay diversas tallas. Y es por eso que al festival nos presentamos con el “Modelometro”, una instalación rectangular con las dimensiones de una mujer (modelo) típica occidental (un aproximado al 90-60-90, con una altura de 1,80 m de largo y 31 cm de ancho), impuesto como ideal de belleza para todas. Sirve para demostrar las diferencias entre los cuerpos y su diversidad en la vida real y que el paradigma reinante está muy lejos de él, ya que según estudios sólo el 5% de la población mundial alcanza estos parámetros. Y al usar la estructura invitamos a todas las personas a romper ese molde que nos imponen sacándose una foto con ella de la forma que se les ocurriera, no para compararnos con el ideal o lamentarse por “no entrar” sino para demostrar cuán inalcanzable es, para mostrar que la belleza viene en todos los talles y tamaños y que todos al ser diferentes estamos más que bien. No decimos que ese 5% está mal, sólo que son un solo tipo de cuerpo entre muchísimos, con lo cual habría que abrir el abanico, dar más opciones y no descartarlo sino agregar el 95% faltante. 100%, ¿No suena mejor? Hay que integrar, no excluir. HAY QUE PONER DE MODA LA DIVERSIDAD.
Con gran entusiasmo debo contarles que la experiencia fue un verdadero éxito. Muchos se acercaban a preguntar pero a otros hubo que atraerlos, nadie nos rechazo; cuando no se sacaban la foto estaban de acuerdo y hasta nos agradecían lo que hacíamos. Y si bien las medidas son femeninas muchos hombres también se acercaron a sacarse fotos o conversaron con nosotros. No sólo eso sino que niños y niñas se arrimaron a jugar con la estructura, ¡qué alegría pensar que las futuras generaciones ya estén pensando en eso y lleven el mensaje correcto! Sin embargo, a pesar de lo positivo que fue no puedo dejar de lado lo negativo. Algunas mujeres se sentían mal, se lamentaban no entrar o, inclusive, enviaban a sus amigas que “quizás” si entraban, porque eran “perfectas”. Lo menciono porque es a ese lado al que tenemos que llegar, porque se empuja a los jóvenes a cumplir con el canon impuesto y si no se logra se está excluido (además de recibir el flagelo de no poder ser parte de ello, porque se está obligando de entrar en él y muchas veces a toda costa y sin medir las consecuencias. Usemos nuestros recursos y herramientas para focalizar en ello.
Para ver más fotos del Modelometro en Lollapalooza Argentina se puede ingresar a esta página: http://buenosaires.endangeredbodies.org/fotos_lollapalooza_2016.
También utilizamos el Modelometro para impulsar la necesidad de una Ley de Talle Nacional coherente e inclusiva, sabiendo que más del 65% de las mujeres tiene problemas para encontrar su talle. El fin es ejercer presión (positiva) en los políticos, en los medios, en los individuos, básicamente en la sociedad misma, “para que enfrenten y controlen el daño de las industrias que explotan el concepto de salud y belleza, y promueven una visión negativa de los cuerpos (…) buscamos combatir la idea de que constantemente hay que estar a dieta” decimos en AnyBody Argentina. Creemos en la diversidad, que todos somos diferentes, que somos más que cuerpos y eso nos hace bellos.
Por último y para cerrar quiero presentarles a mis compañeros:
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